martes, 21 de abril de 2015

Llegada a Buenos Aires

Arribó a Buenos Aires en una mañana helada. No pidió taxi por tacaña. Se perdió en un bus y quedó varada en una plaza que sería desde entonces su punto de encuentro para con el mundo. Se sentó en el medio del tumulto e irguió un cartel donde decía con su temblorosa letra "Se leen cuentos, se enseña español y se regalan besos". Ya tenía laburo pero justificaba su acto de mendigo para cubrir los gastos del vicio al tabaco. Ahí fue donde conoció a todos los mal aspecto a quienes en poco tiempo llegó a llamar amigos. Lo hacía siempre. Dejándose encantar por cualquiera. Estuvo con uno que otro, no con todos. No quería ser la puta del lugar. Me invitó a su piso esa misma noche. Abrió el grifo de la cocina y enjuagó sus manos hasta los codos. "Lo malo de las duchas a media noche es que se despierta a los vecinos" -se dijo como para si misma- "me resulta ilógico no poder presentar una queja al condominio por los ronquidos. Pero no tuve opción, el acuerdo de hipoteca era aun más atractivo que esos comerciales de radio hechos canción".

Era tan dulce, con una piel tan tersa que al tocarla, las mismas manos resbalaban. Tan pequeña se veía entre mis brazos y tan inmensa sobre mi. Le besaba los muslos y reía. Le besaba la espalda y soñaba. Pero nunca cometí el error de besarle las mejillas... Corría el rumor que la humedad en sus pómulos traían consigo polillas de recuerdo del amor que nunca llegó a consumar. Así que intenté mantener la postura. Educación antes del azar.

lunes, 13 de abril de 2015

Los once son para pedir deseos.
Los trece aceptas la resignación
Los doce dejas el alma en velo
Los catorce aceptas que ya voló.

Y tomaba sus manos, contando los deditos
1,2,3,4,5
Y mordía sus pies, contando los deditos
1,2,3,4,5
Su rostro blanco, sus labios transparentes,
Sus ojos, siempre cerrados...
Podía verlos brillantes, como dos estelas, escondidas tras los parpados.
Y cantaba las canciones que sabía
tarareando aquellas estrofas que nunca aprendí
juraba que me oía.
Poco creo desde esos días.

Y las nubes lloran
Y las fuentes lloran
Y los brazos lloran
Y la tierra se estremece al andar
Y las gotas sangran
Y las venas sangran
Y el agua no para de brotar
Y las nubes lloran
Y las fuentes lloran
Y los brazos lloran
Y todo llora menos mis ojos.

Pero cómo no iban a llorar?

Los diez ignoras la naturaleza
Los quinces haces una fiesta
Los nueves juegas cual pequeña

Y mordía su nariz
Y mordía las sábanas
Y mordía los bordes de mis uñas
Y contaba sus dedos
Y recitaba poemas
Y miraba las cuentas
Y nadie nunca dijo nada.

sábado, 4 de abril de 2015

Hay amores de amores

Hay amores de amores...
Por ejemplo:
Están estos que te desgarran el alma
y estos otros que le dan alma al cuerpo
Hay amores de esos...
Que te quitan el sueño
y también los hay del otro
Que te hacen soñar.
Los que te hacen gritar "Te amo"
Los que te hacen callar "Te extraño"
Los valientes
Los arriesgados
Hay amores que se sienten al primer beso
Y otros que tardan años antes de ser cosechados
Que te incineran la piel
Y que te abren los poros
Absurdos, llenos de locura
Pacientes, llenos de cordura.
Hay amores de amores...
Amores que no duran
Amores para toda la vida
Amores que no necesitan amante para crecer finos en la lluvia
Y amores que sin presencia se esfuma la calentura
Yo he amado de la única manera en la que sé amar
Odiando la distancia
Temblando en la prescencia
y ahora amo de otra forma, mucho menos agraciada, muchos más planificada. Increíblemente inesperada.
Mi corazón se ha vuelto noble ante la figura de un hombre a quien descubro con cada palabra.
No se incinera con sus besos
No me deshuesa, no me reclama.
No genera ira dentro de mi pequeño cuerpo.
Es un amor tranquilo, que va en calma...
Pausado.
Con intermedios y sin inconvenientes.
Es un nuevo amor con el que experimento otras facetas que nunca me interesaron hasta los momentos.
Es un amor que mide motivos,
Que no se arroja ante las circunstancias
Es un amor que es primero mío y después veremos qué nos falta.
Es un amor que primero me ama y luego intenta que ame a otros.
Es un amor completamente nuevo, mucho más maduro, mucho más centrado. De esos cuya llama flamea tenue pero no se consume.

Esta noche, por primera noche, dije "Te Amo". Sin que mi cerebro hiciese huelga por contarlo.

Hay amores de amores
Y esta noche, yo he amado.