lunes, 12 de junio de 2017

13 razones porqué

Algunas veces, muchas tantas, olvido las lecciones aprendidas para desaprender de a ratos.
Confieso, el placer más culposo es cometer un error, de nuevo.
Tratándose de la vida,
la muerte
y las parodias de la incongruencia
me encuentro frente a frente con el reflejo de mis mejores momentos
y a pesar de bastarme
y a pesar de ser buenos
como siempre, yo espero.

Así que de momento, intentemos componernos
Vayamos armando pieza por pieza el desastre de la cabeza para que cuando a los pies les de por picar, hayamos terminado de pagar la renta.

Me despido así de mi blog (de este) para comenzar uno nuevo.
Como siempre, bajo el mismo pretexto:
Olvídense que me ocuparé demasiado de ello.

Si alguna vez leen "pago bueno por pésima redacción"
Avísenle a su servidora
que con pecado mendigaré monedas
para coquetearles a todos como señora.




martes, 25 de octubre de 2016

Entre números y mentiras

Qué caprichosos son algunos con las fechas, jamás entendí claramente el por qué hasta que un día, bien pudiese ser cualquiera, la maldición me recordó tu nombre y desde entonces, no pude dejar de darle vuelta.
Ahora que comprendo a profundidad la necedad e innecesariedad de mis allegados por fijar en su memoria días en el calendario, noto que la única forma de no romantizar los recuerdos es cronometrarlos. ¡Vaya error el mío!, yo me quedé en el tacto.

Y así fui desarrollando una historia en base a los baches que me dejabas cada vez que yo huía. Rellenando las imperfecciones por detalles encantadores que nadie más que yo, en ese momento, vería. Y lo peor, justifico ahora, es que no hablo del tiempo pasado si no el momento exacto en el cual me daba por pensarte un rato.




sábado, 24 de septiembre de 2016

No me recibas con las manos vacías

Resultó ser este un sentimiento tan familiar que se vistió con mis propios huesos.
Caí en cuenta entonces de la decepción d su alma.
Su deprecio, era ciertamente hacia mi, más no era conmigo.
No de la forma en la que ustedes creerían...

            "En esta hogar siempre serás bienvenida. Más no esperes que te abra la puerta"

Me vi reflejada tras los cristales de todas mis relaciones pasadas.
Romances épícos, amores taciturnos y más de un arrepentimiento post-coital
Todas sin excepción formaban parte de un retrato cómico y adolescente de esta cara ya tostada.
Viajar a cada uno de forma individual o colectiva mitigaban la misma sensación. Pero cuando alguna pretendía colarse al presente, entonces recordaba lo bien que me la había pasado.
Pues nunca pude olvidarme de lo malo.

No diré que así era yo para él, pero al menos consigo una explicación coherente.
Este hastío es de antaño.

Contigo ya no tengo secretos.
Frente a ti no necesito pretender.
Me encontraste mucho antes de haberme perdido,
y para cuando te hallé, era tan tarde que ni tu, ni yo, asistimos.

Somos en nuestro mejor momento cuando nos olvidamos del tiempo.
Y nos vemos de cualquier color
Y de pronto, la vida no pesa en los hombros
La vida no existe, el mundo es ajeno.
Nos fugamos de nuestras realidades porque en ellas, ambos no cabemos.

Esa noche dormimos más juntos que nunca antes. La cama parecía una llanura desierta, a excepción del pequeño espacio que ocupaban nuestros cuerpos, haciéndose aún más pequeños uno sobre el otro. Y sin embargo, nunca nos sentí más alejados que en aquel momento. Como si esos cuerpos no fueran nuestros.
Mi mente nos observaba desde la comodidad del sofá, viendo una grieta casi imperceptible entre las sábanas que enseñaba un abismo que nos separaba por no menos de cinco millones de años.

Su piel exudaba calor y miedo, terminando por reventar el termostato de mi alma. Más allá del sentimiento físico y tangible, se encontraba este vapor indescriptible que derretía las tinieblas desde dentro.
Lloraba a cantaros un mar de lágrimas secas. La oscuridad era absoluta, así que ninguno de los dos se dio cuenta.
Su cuerpo estaba al lado del mio, ciertas partes sobre mi y muchas otras inclusive dentro. El movimiento de mis manos resultaba ajeno a la escena, no hacían caso a los mandatos de mi corazón. Insistían caprichosamente en coordinar a dónde irían. Después me marcharía yo.

Y luego nos decimos adiós,
con el descuido de quien obvia la muerte

miércoles, 29 de junio de 2016

En la Concordia el pan está caro

Guardo en el bolsillo todas las promesas que nunca tuve
para sacarlas en cara a el destino cuando quiera cobrarme cuentas pasadas
Vamos por el principio, que siempre me duermo en los finales
Ahora que el martirio está tranquilo, me sobra el tiempo para reunirme con mi hastio.

Algunas veces me encomiendo al tabaco
Diciendo improperios propios del borracho
Es tan dulce que quema la garganta
Me gusta más cuando explota en mis entrañas

Ande,
Diga de una vez por todas que la quiere
que sus piernas llegan hasta niveles impensables de placeres
Blasfemando en otras lenguas la sal que le falta en la mesa
No me comprometa en pesadillas de sus trasnochos
Mire que con la inflación no llego ni al cerrojo.

Voy a tomarme la noche entera
Voy a acabarme la botella
y mañana seguramente estaré a las 8 de vuelta
Señorita "ya lo vi" nunca se ausenta.

Son meses largos los que no escribo algo
La vida se ha complicado
Me vale madre la suerte
la mía se ha marchado.

Lloro en público y me masturbo con la puerta abierta

martes, 3 de mayo de 2016

I got 99.000 views but a book ain't one

Estoy marchando sobre una nube
El cielo parece no tener silencios
Las gotas saturan los oídos
El frío es cruelmente ligero
Qué otra cosa quisiese hacer si pudiese...
más que recostarme a escucharla,
hablar sobre perdidos y encontrados
y los tantos otros que jamás olvidamos
No todo es articulación
Algunos sentimientos nunca tocaron el corazón
Pero la brisa que no perdona
Tranquilamente se lleva las horas
Insignificantes son aquellas noches sin reclamos
Que se van tan pronto como llegaron
Imposibles son los días salados
Áridos y naranjas, cual torpe enamorado.
Todas las promesas del universo no bastarían para revelar sus secretos
Invictos aquellos dioses, ídolos y santeros
Mientras exista vida, cobraremos dudas
y algunas hasta nos costarán la vida.
Que no se me vea al pasar,
que camino sobre nubes
Que no se me escuche al cantar
para que la sospecha no me enturbie.

¡HIT ME!

viernes, 1 de abril de 2016

Abril


El peligro atrae por los latidos que contrae cada vez que se disipa la paranoia entre las venas. A estas alturas ¿de qué podría quejarme?
Habría sido pirata de haber traficado coraje, pero algunos pedidos demoran más que otros en hacerse efectivos y a purita crudeza sé que al patrono no le simpatizan los hombres en plan de retorno.
Nunca pude irme muy lejos de casa, fallaría mi orientación si piso un terreno baldío, así que no convenzo a nadie de caminar conmigo.
¿Quién pueda leerme el significado de una paradoja? sería de gran ayuda en estos tiempos de pampero.
Evoco a todos y cada uno de los lugares comunes cuando el nido está vacío
a ver si por mero accidente, le da por florecerme memorias
existencias de vida que nunca llegó a penetrar este cuerpo, pero las hallo tan dentro, que me miento.
Son gustosas las tardes en que descubro quién soy y cómo me siento
más placenteras cuando no soy yo a quien revelo.




martes, 29 de marzo de 2016

Tengo mi cortoooo!

Llámenme egoísta
pero yo no quiero que mi hijo se convierta en una persona importante
de esas que hay que esperar cuando les hablas
y que se les nota en la frente
cuánto les cuesta el tiempo que te dan en escucharte
No,
no.
De verdad, no quiero.
Que viva en un mundo inentendible por el cual no se molesta en contarte,
Que el esfuerzo que le requiera levantarse cada día y existir sea tan admirable que deba condecorarle por ello a diario.
No,
no.
No estoy pidiendo un fracasado.
Yo solo quiero un hijo que por favor, lave los platos.